domingo, 16 de agosto de 2009

La colita adormecida.

Y “colita” se acerca al “pato” con la intención de vencer sus miedos. No demuestra alegría ni ansiedad. Oh… el “pato” ha volteado a ver a “colita”… ¿Qué hará “colita”? Nada… recibe un golpe en el ojo y “chinita” va a rescatarla sin olvidarse de primero golpearme en la cabeza diciendo: “te dije que “colita” está enferma, cuídala del “pato” o yo a ti te sacaré un ojo”. Y “chinita” carga a “colita” con lágrimas en los “ojos”.

Qué nos pasa.

Dicen los vecinos que ella antes de servirle la comida, prende su equipo y le hace un baile poco erótico cantando una canción antigua. Todos los días él se va a trabajar y todos los días… el vuelve a casa.

Tonto.

Esa señora trama algo… todos los días lava su ropa. Todos los días tiende su ropa… la misma creo. Su esposo es medio… tonto. Tonto. Ella es feíta. La veo bajar las escaleras siempre… siempre está con esa llave en su mano. Es un matrimonio raro, no me los imagino. Su esposo está serio y tiene una voz muy grave y decidida para ser un tonto… pero siempre ella habla por él cuando están juntos, ella debe estar enamorada o quiere creerse eso. Siempre está vigilando que nadie la vea lavar su ropa y siempre camina lento, siempre habla pausadamente llevando esa llave creyendo seguramente que nadie se percata de lo evidente. Siempre mirando hacia todos lados, ella está tramando algo.

Tú no estás con hambre. Eres un reloj, un reloj loco, un reloj loco y malogrado.

Estoy en el costal de Gerardo y tengo hambre, no he comido desde las cuatro… Estoy enamorado de Laya (hermana de Gerardo) tiene unas pantorrillas… unos talones… Gerardo, maldito todo lo que te han dado en el día te lo has comido mientras caminabas… qué pasó con tu conchudez. Puedo oler… puaj… refrescos, lo que menos quiero ahora es un refresco añejado. Ya pues Gerardo, algo para el costal… tenemos hambre aquí abajo (Yo supongo que Gerardo creerá que tienen hambre sus juguetes ya que cuando busca su comida no la encuentra (yo me la comí) y aún así sigue metiéndola en el costal… bueno, sea lo que sea yo estoy feliz que este así de loco) Gerardo… maldito seas, van a dar las cuatro de nuevo, como me gustaría poder gritarte (En realidad Gerardo le puse yo, Laya lo llama “oye” todo el tiempo”) Está caminando rápido… o no… diablos el tiempo pasa demasiado lento cuando estoy con hambre… ¡Gerardo tengo hambre! ¡Ya van a dar las cuatro de nuevo! ¿Date cuenta no?

¿Dónde estamos?

Nadie te ve. Estás asustada porque no sabes si es un ensayo o un orgasmo común y corriente. Están saltando a tu alrededor y las luces queman tu espalda. Lo que gritas ya no tiene sentido para ti, no es lo mismo que en tu departamento ¿no?
No son perfectos… y no hay nadie que critique, no hay nadie que suelte un bostezo ¿preocupados? No, solo tú. Ellos saben que es lo que está pasando… yo sé que es lo que está pasando, pero tú estás muy lejos de atreverte a preguntar. Sigue gritando. Sigue saltando, sigue esforzando tu vista.

Bosque de lana.

Mis dedos están temblando toscamente, mi ropa se ha congelado y solo tengo este teclado sin monitor. Aquí reina el olor de un ano. Tengo una mandarina en mi bolsillo… no me gustan las mandarinas. Tengo un alfiler en mi oreja. Aquí no hay señal… la impresora se está apagando. Será mejor que termine

No olvide.

Ya nos cansamos de estar a salvo.
(¿A SI? YO PENSE QUE VENÍAN POR UNA CERVEZA)
Es que no se cómo funciona esto… estoy algo nervioso, pregunta ¿es por un tiempo?... no es que me vaya a arrepentir…
(¿NO SABEN LO QUE QUIEREN VERDAD?)
Quiero querer un plato de cualquier cosa… estar feliz entiende… quiero querer…
(¡NO ME VENGA CON CURSILERÍAS!, ¡SABE LO QUE QUIERE O NO!)
No.
(SIGUIENTE)
¡Oiga!… ya, tome mis llaves.
(… SIGUIENTE)
(¿Las de mi auto también?... mi ropa, nuestra ropa)
(…)
Tómela a ella. Nos vamos sin nosotros… ¿sí?...
(A LA CAJA 4 ENTONCES)
Deme aunque sea un cuaderno… …ya ya, está bien no quiero nada.
(SUERTE)
La necesitaré supongo.
(BUENO, OIGAN USTEDES, SEPÁRENLOS… ¡EH EH! NADA DE DESPEDIDAS, ESTO ES SERIO)
No me jodan, al menos tengo que despedirme… un abrazo…
(DE UNA VEZ, SEPÁRENLOS. ¡SIGUIENTE!)
…¿Caja cuatro no?
(NO OLVIDE DEJAR SUS LLAVES Y SU ROPA. QUIZÁ LE VENGA BIEN ALGUNOS PUÑETAZOS…)
Puñetazos… no… bueno… pero me dejan darle un abrazo pues…

XO.

Embaracé a tu hermana hoy. Tengo quince en el bolsillo ¿quieres un café tibio? No estoy jugando a ser tu amiguito de colegio. Hoy rescaté a los juguetes de mi juventud… también encontré el arete de ombligo de mi sobrina… bueno, era un “BATMAN” con la mejilla negra, un “BATMAN” con la cabeza y pierna mordidas y un “COYOTE” que me lo regaló una puta cuando tenía apenas “SIETE AÑOS” (¿la puta o yo?) Te dije que tenía… ¿quince? Tengo dieciséis con cincuenta… ¿Ya te dije que hoy me embaracé? Está bien… café frío.

Amarillento.

Hoy terminé con mi ella. Hoy fui a la casa de mi amante y la bese con ansias en los ojos. Hoy me prometí no fallar a nadie. Veo el nuevo techo de mi departamento, el nuevo fluorescente, veo… que tengo nuevas distracciones. Aquel espejo ha ido envejeciendo tanto… ha ido perdiendo brillo… ha ido perdiendo alma. Tengo ganas de llamar a mi madre y decirle que soy un buen hijo, deseo hacerle el amor a la chica de la que una vez estuve enamorado (ella), muero de ganas de empezar a leer el libro que acabo de devolver. Tengo hambre. No hay nada para comer en la cocina y me voy a quedar dormido en la ducha… no puede ser posible esto. No, cómo no va a poder ser posible.

Lucidez.

Aquí, hecho pedacitos, creo ver mis intestinos bajo mi estómago. Huelo a ardor, mi sangre ya no tiene sabor. Tengo miedo, si. En cualquier momento puedo morir pero pienso que debo mantenerme lúcido en mis últimos segundos. Dónde estará ella… mañana por la mañana se enterará y se hará la valiente, morderá sus labios, llorará y luego se hará la valiente. Como quisiera que no viera mi cuerpo… pero la sádica querrá verme de todas maneras. “No hay necesidad tarada…” No puedo mover mis brazos… carajo… quiero escribir en el suelo… o algo por el estilo… no… bueno, total, no puedo mover mis brazos. Y ahora… que por un instante de locura pienso que podría salvarme, me desespero. “No seas tonto, ni si quiera puedes mover la boca…” A ver… lucidez… lucidez… no puedo salvarme…