- Porqué cortaste la música.
- (silencio)
- ¿Estás despierto?, ¿Ya pensaste en algo verdad?... ... ¡Respóndeme!
- Gr…. No, no se me ha ocurrido un carajo.
- Pues… Qué esperas, ¡que se te ocurra ya!
- …¿Quieres callarte unos minutos?
- No, si me callo, si me callo la boca… a eso te refieres no…
- ¡Si…! Me refería a que cierres el pico.
- A mi me vas a hablar bien. ¿entendiste? Y te decía que si me callo la boca, no habrá un tema de conversación. Y por lo tanto nos aburriremos más de lo que ya estamos. Así que no me callare la boca porque tú lo dices.
- De que maldito tema de conversación hablas, lo único que haces es chillar…
- (silencio)
- Ahora, como veo que por fin no se te ocurre nada que responderme, aprovechare el momento para quedarme pensando y que se me ocurra algo.
- Ja…
- ¿ja?
- Que cosa.
- Cómo de que “ja”
- No dije nada.
- Si, mejor. “No digas nada”
- (silencio)
- (silencio)
- Me duermo…
- No te duermas.
- Pero que quieres que haga. Has cortado la música.
- Era una puta canción que se había repetido como treinta veces.
- Me gustaba mucho.
- A mi no.
- ¿A no?, pues te escuche tararearla como a la cuarta vez.
- Dios…
- O me vas a decir que no…
- ¡Cállate, ¿no?!
- No, no quiero, tengo sueño, y creo que me voy a dormir.
- No te duermas mierda.
- Mierda, mierda.
- No te duermas.
- Me muero de sueño.
- ¿Y yo no?
- No lo se. Me aburre de que estés ahí sentado sin que se te ocurra nada.
- A mi me aburres tú.
- Si no fuera por mí estarías dormido.
- Eres patética.
- Adiós, me voy a dormir.
- Vete, si llegan no me tomare la molestia de ir a buscarte.
- Si llegan me voy a salvar, porque no creo que se te haya ocurrido algo.
- Bien, lárgate malagradecida.
- Bien.
- (silencio)
- (silencio)
- (silencio)
- (silencio)
- (silencio)
- ... ¿Ya llegaron?...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario