domingo, 8 de junio de 2008

14 de enero.

Los últimos días he tomado conciencia de una confusión mental grave que invade mi cerebro. No es fácil pensar a fondo en esto. Sinceramente estoy espantado con este comportamiento que me toma por sorpresa muy seguido. Creo que empecé a pensar en esto tras leer los pensamientos del dueño de uno de los blogs por los cual me gusta vagabundear. En fin, lo cierto es que tengo un problema de adaptabilidad al medio en donde me encuentro, no se si llamarlo adaptabilidad rápida” ya que eso suena a beneficio. Sin embargo esto me perjudica. Si bien me adapto rápido, me aburro rápido. Es horrible. Había estado mucho tiempo en un medio al cual no podía soportar, era asfixiante, y deseaba con todas mis fuerzas trasladarme al medio en el cual estoy ahora.

Al fin, lo hice. Y me decía todos los días cuan maravilloso era estar aquí, en mi medio, sin duda era el lugar a donde pertenecía. Tenía sus defectos, como cualquier cosa maravillosa en esta vida.

Y ahora, al haber pasado un mísero año, las reacciones frente a mis deberes son las mismas, las que ya conocía. Me quedo frente a la computadora tratando de concentrarme en lo que debo hacer y sin embargo, vuelo. Vuelo más alto de lo que debería. Hace un par de horas, pensé en regresar por unos minutos a mi medio antiguo para tomar conciencia que el medio nuevo era increíble. Y me encontré con la horrorosa sorpresa que el medio antiguo me resultó muy atractivo.

No, en realidad, no exagero, no exagero nada. Odio esta situación que pienso se repetirá muchas veces en mi vida. Mi distracción, a pesar de todo, la tengo porque me fascina.


"Harold."

1 comentario:

[Cr*] dijo...

asi somos los humanos, queremos lo que no tenemos. Somos caprichosos pero si no fueramos asi ... seríamos máquinas o nose :P