viernes, 13 de junio de 2008

Se abrió la puerta y la enfermera entró a ver al paciente psiquiátrico carente de cuerdas vocales.

¿Estás feliz? No, que vas a estar feliz tú. Tú nunca estás feliz. ¿Estás riendo? No rías, tú no debes reír. ¿…? Eso es, ni reír ni sonreír.

¿Estás pensando? No pienses, anda, llora. Siéntete un poco más mal, un poco más. No me convences.

Mira tus brazos, míralos. ¿Están deformes no? Claro que están deformes. Observa tu estómago ahora, ¿lo ves? ¿No te gusta verdad?, claro, no te tiene que gustar, es horrible, y eso que no puedes verlo por dentro. ¿Alcanzas a verte las piernas? No, no te destapes, no quiero verlas. Pero no puedo evitar ver tu rostro.

¿Qué mas? Tú sabes que más. Sabes por qué debes sentirte aún más miserable. Yo no lo sé, pero puedes contarme. Cuéntame...cuéntame...¡Qué esperas!…

(Se abrió la puerta y la enfermera...)

1 comentario:

[Cr*] dijo...

manyaaaa! me gusto aunque creo que entendi algo que no era lo que querias decir :P
pero esta bien chevere (Y)


Pucs