lunes, 2 de febrero de 2009
Piñata.
Maldita sea, puedo ver como nuevamente ese payaso se acerca sonriéndome. Mis padres parecen jóvenes, están… ¿golpeando una piñata? Qué pasa aquí señores… demonios con el payaso de los labios morados. Mi hermano está dormido… yo ni si quiera puedo intentarlo, cierro los ojos y la música se eleva. Hay una mujer ebria… y el payaso parece que se ha propuesto molerme la mente con sus dientes. Tengo ganas de llorar, necesito un espejo… quiero cerciorarme que soy yo el que está pensando y viendo todo esto.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
13 comentarios:
Despierta.
Todo está bien.
A pesar del miedo,
a mi me parece un gran sueño...
Cariños, Verde...y mil gracias por estar siempre...
- Es solo un sueño, Desperta amigo, desperta. La narración excelente. Un abrazo grande. Ade
Ay, no me gustan los payasos.
Creo haber tenido pesadillas parecidas.
a mí los payasos me ponen a temblar también. y si sueño con uno se trata definitivamente de una pesadilla.
espero que al abrir los ojos no lo encuentres más.
un beso
cuidado con el espejo, no vayas a caer en un sueño, saludos
Payaso,araña y cartero.
Yo le tengo fobia a los payasos, sólo imaginarlos............
Yo lo que les tengo es un gran respeto.
Yo amo a los payasos, quizas era yo la que estaba viendo.
Pobre niñito
Lo reitero, miedo, terro, odio.
Me encantó. La necesidad del espejo para cerciorarse que ese que vemos ahí es el que somos.... Perfecta imagen! Abrazos.
Que valiente cerciorarse de eso.
Publicar un comentario